Después de desayunar, nos dirigimos al Colectivo. El minibús nos llevó a Barranquilla y desde la parada del autobús tomamos un taxi hasta el aeropuerto. Allí tuvimos que esperar un rato hasta que pudimos registrarnos. El aeropuerto es en este momento más bien un arreglo provisional con carpa y contenedor, ya que el edificio real es probablemente renovado, el Dunkin Donuts tenía sin embargo mesas, sillas y sabroso café. Volamos a San Andrés con la aerolínea Wingo.
¡También llegaron nuestras mochilas!
Un taxista nos recogió en el aeropuerto. Aproximadamente 20 minutos en coche a San Luis. La Srta. Margarita nos recibió muy cordialmente, aunque ya eran las 22:00 horas. Nos enseñó todo lo que había en el pequeño apartamento que alquilamos aquí. Ella sólo habla español y por eso hablamos con las manos y los pies y con el traductor de Google.
Silke